1 mar 2008

Morrocoy desde Chichiriviche: Cayo Sal

Para llegar a Chichiriviche sólo se debe seguir la ruta Moron - Coro, luego de Tucacas como a 30 min se encuentra un cartel que indica la entrada al pueblo de Chichiriviche, pero desde allí aún faltan como 15 min de recorrido para la entrada real al pueblo que lo indica el Destacamento de la Guardia Nacional, mientras, en el camino ya se difruta el cambio de ambiente, muchas aves y zona de manglares, el sol esperando para regalarte el bronceado que buscas y la sed que te hará disfrutar la primera bebida en chichiriviche.

Al pasar la Guardia se encuentra el embarcadero de Las Luisas, dicen que desde allí los paseos a los cayos son más baratos que desde los muelles principales y sin tanta gente, pero como el propio turista siempre se termina llegando a donde va todo el mundo.

Chichiriviche ya no es un pueblo tan pequeño, ha crecido y se han multiplicado las opciones de alojamiento y para comer. Para alojarse consigues diversidad de precios y comodidades, desde lo más sencillo hasta lo más lujoso, ideal porque para todos está dispuesto. Igualmente para comer, ya no sólo el deseado pescado frito, los cocteles de mariscos y las ostras son lo que abunda, se consiguen restaurantes con variedad de platos como si de una feria de comida de un centro comercial se tratara.

Hablando de lo que vinimos, al pasar la Guardia esa es la avenida principal y al final de ella se encuentra el malecón que presenta el mar y los cayos más cercanos:
Cayo Sal, Cayo Muerto y Cayo Pélon, por supuesto el viaje a alguno de ellos es más barato y de menos tiempo (unos 5 min en lancha). En el pueblo hay varios terminales desde los que puede salir, no olvide acordar la hora de regreso con quien lo lleva aunque siempre hay lanchas yendo y viniendo.

Cayo Sal es arena, sol y playa de lo mejor... hay muchos cocoteros que proveen áreas con sombra, aunque conseguirá quien le provea un toldo con sillas y le ofrecerá un menú para el almuerzo.
En el Cayo hay lugares que preparan comida y sirven bebidas, pero siempre es bueno ir bien pertrechado de la comida y bebidas de preferencia.También le visitarán los típicos vendedores de ostras, vuelve a la vida y demás cocteles con nombres muy originales que evocan sus propiedades afrodisiacas. Para probar estos cocteles es bueno esperar que pase el vendedor que le inspire mayor confianza, en cuanto a higiene y contenido del producto, generalmente tienen pulpo, calamares, camarones y pepitonas, todo en salsa vinagreta.

Luego de disfrutar del agua se puede dar una caminata hacia dentro del Cayo, el paisaje es espectacular, se encontrará con el fenómeno que da nombre al cayo: una capa de cristal muy blanco que bordea la laguna interior...
se trata de sal secada por la acción del sol... es un momento alucinante el tomar la sal entre las manos y caminar curioseando la forma en que se acumula en la orilla.


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